Esta semana descubrimos cosas interesantes acerca de the Black Fairy (Jaime Murray) y sus motivos para ser «tan mala». No empezaremos el recap sin antes avisar: estamos decepcionados.

A tres capítulos del final, la serie decide desvelar qué le paso a Fiona para terminar convirtiéndose en the Black Fairy. Ya nos lo esperábamos viendo que de villana, pese a que apuntaba maneras, no daba la talla, pero su historia y justificación ya nos resulta familiar. Cuando hasta la propia serie lo admite…hay un problema.

Fiona debe tener un gran potencial para la magia, porque solo leyendo libros consiguió transformarse a sí misma en un hada. Resulta que Rumple (Robert Carlyle) nació destinado a ser the Savior. Por alguna razón, su hada madrina decidió contarle a la madre que su destino era morir en «la gran batalla final».

Vaya, una historia que en 5 temporadas no habíamos escuchado, y en la sexta no paramos de oirla. ¿Pero sabéis qué? Hasta ahora no ha muerto ninguno. Todos se han desprendido de sus poderes de alguna u otra forma.

A lo largo del capítulo observamos el patrón que la familia de Rumple parece tener: conseguir un gran poder por un motivo noble, y acabar prefiriendo el poder a sus propios hijos. Fiona hizo exactamente lo mismo que su hijo con su familia, y quizá por ello nos enseñan como Rumple termina escogiendo luchar al lado de su madre, tal y como ella vaticinó, mientras engaña al resto de la ciudad.

 

Al parecer, el corazón de the Black Fairy es tan negro que parece de piedra. Sin embargo, lo único malo que hace es despojar a su hijo de su destino. El resto, cosas random en su prisión que nadie cuenta ni enseña pero al parecer son terribles. Really? ¿Más terribles que lo que hizo the Evil Queen (Lana Parrilla) con todo el Enchanted Forest? ¿Peor que las millones de cosas que el propio Rumple ha hecho? Lo dudo muchísimo.

Creo que estamos ante la villana más floja de toda la serie. Y con diferencia. Es muy triste que nos hayan hablado de cuan perversa es esta mujer para al final enseñarnos…nada.  No ha hecho absolutamente nada por lo que debamos temerla. ¿Por qué está Emma (Jennifer Morrison) preocupada siquiera? Se ha enfrentado a miles de cosas peores.

Por si el capítulo no había repetido suficientes tramas pasadas ya, el final del episodio nos muestra como Rumple vuelve a engañar a todos, incluso a Belle (Emilie de Ravin). Oh, vaya, qué sorpresa. No solo eso, sino que seguramente también esté engañando a su madre, o algo más ha pasado que no nos han enseñado aún.

Al final, la inteligente familia Charming decide celebrar la boda igualmente. Es turno de un capítulo musical y por favor, no nos decepcionéis aquí también. Dandos algo bueno esta temporada, que ni villanos ha tenido. En fin, por lo menos hemos tenido esto:

¿A vosotros os ha gustado el episodio? ¿Os ha gustado el personaje de the Black Fairy? ¿Creéis que Rumple esconde un as bajo la manga?

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