Quantico 2×19: Almost over

Cuesta abajo y sin frenos. Así van nuestros queridos amigos de ‘Quantico’ en lo que respecta a resolver esta nueva trama de conspiraciones contra el gobierno de los EEUU. El fin de esta 2ª temporada está muy cerca, pero, de momento, las expectativas de que el final sea favorable para “los buenos” cada vez son más bajas.

Esta semana no ha habido misiones secundarias, todos se han dedicado a un único bien común: celebrar la fiesta de compromiso de Clay (Hunter Parrish) y Maxine (Krysta Rodriguez) como tapadera para reunir a los 8 implicados en la conspiración e intentar convencer, al menos a uno de ellos, de que debe unirse a su bando y dar toda la información que tenga a cambio de hacerlo inmune.

Para empezar, el plan no era perfecto en absoluto, así que ver cómo les salía todo al revés no ha sido demasiado sorprendente. Saben que están a punto de ser descubiertos y lo único que se les ocurre es juntar a los artífices del complot para intentar reclutar a uno de ellos. No es obvio, qué va, para nada… Si esto es lo que les enseñaban en la academia no comprendemos por qué no nos hemos apuntado también nosotros.

El único que parecía haber conseguido algo es Ryan (Jake McLaughlin), pero al final resulta que, efectivamente, la trampa se la habían tendido a él. Un reportero le graba en una de sus excursiones para contactar con el enemigo, alegando que él y todo el clan de la CIA están detrás de una operación clandestina contra el país y su gobierno.

Alex (Priyanka Chopra) también saca tajada de esa fiesta de compromiso, porque el que era su objetivo decide que quiere reclutarla para su equipo. Alex se decanta por la que parece la única opción desde su perspectiva: decir que sí y meterse de lleno como infiltrada en el grupo de los colaboradores. No sabemos si fiarnos de la confianza que depositan en ella, esto también podría tratarse de una trampa.

Aunque, dentro de todo este lío político, si algo nos ha dado una razón de peso para autoconvencernos de que no estamos locos por seguir viendo una serie que no entendemos, ha sido el magnífico regreso de Caleb (Graham Rogers). Él es el reflejo de todos los espectadores de ‘Quantico’: pasa de todo, él solo está ahí por las fiestas. Y eso está genial, porque entre tantos engaños y complots, ver que los personajes en realidad son personas que de vez en cuando sienten la necesidad de reírse, es un soplo de aire fresco.

El drama entre Clay y Shelby (Johanna Braddy) que nunca parecía cuajar ha visto hoy su inicio y su fin. Esta historia siempre nos pareció dudosa pero con el capítulo de esta semana ha quedado claro que más que nada lo que había entre estos dos era un extraño romance imposible que el mayor de los hermanos Haas se había montado en la cabeza. Otra vez será, Clayton, céntrate en tu prometida y deja de querer ser tu hermano pequeño.

Sin embargo, les ha servido de pretexto a los guionistas para hacernos ilusiones con una reconexión entre Caleb y Shelby que al final ha resultado ser una forma de hacer que Clay se quite de la cabeza las extrañas fantasías sexuales que tiene con la ex de su padre y de su hermano pequeño. ¿Qué pasa con Shelby y los hombres Haas? Demasiado surrealista. Casi tanto como ese momento de tensión sin definición exacta que hemos vivido entre Alex y Owen (Blair Underwood) porque, ¿qué demonios ha sido eso? ¿Estos dos no tenían una relación de admiración profesional? ¿A nadie más le ha parecido incómodo?

De momento, los de ‘Quantico’ van perdiendo la partida. No siempre se puede ganar, pero esta vez están más expuestos que nunca, ¿conseguirán remontar?

¡Comentemos!

Isabel Bienzobas
AUTHOR
PROFILE

Quizás te pueda interesar...

¡Comenta el capítulo con nosotros!