La serie musical de FOX ha celebrado su capítulo número 100 por todo lo alto: todos los graduados y algún que otro ex-guest regresan para despedir al club reinterpretando algunas de sus mejores canciones y actuaciones. Si todavía no has visto el capítulo no continúes leyendo porque te encontrarás con numerosos spoilers sobre el episodio.

Maravilloso. Este capítulo ha sido maravilloso. No he dejado de sonreír durante los 43 minutos que duró el capítulo, lo sé porque cuando terminó me dolían las mejillas. Y es que volver a ver a todos los personajes juntos no suele ocurrir muy a menudo desde el final de la tercera temporada, pero volver a ver a las viejas glorias del McKinley caminando de nuevo por sus pasillos me ha hecho muy, muy, muy feliz. Y lo mismo con la idea de volver a interpretar canciones que han marcado algunas tramas de los protagonistas en el pasado por decisión de los fans de la serie. Bien hecho, Murphy.

Si os soy sincero a la que más echaba de menos era a Quinn (Dianna Agron), es mi celebrity crush más grande y soy débil en todo lo que se refiere a Dianna. Aunque también era la que más tiempo llevaba sin aparecer por la serie (si hablamos solo de estudiantes) nada más y nada menos que desde la boda de Will (Matthew Morrison) y Emma (Jayma Mays) a mitad de la cuarta temporada donde tuvo un affair con Santana (Naya Rivera) del que nunca más se volvió a hablar. Su entrada fue majestuosa, me pareció un buen detalle que se trajese con ella a su «novio» Biff, interpretado por Chace Crawford al que todos reconoceréis por su participación en la extinta Gossip Girl, supongo que los fans de esta serie estaríais muy contentos por su aparición estelar y, aunque le dio una buena storyline a Quinn, no pude evitar odiarlo por lo que le echó en cara hacia el final del capítulo, me alegré de que terminase en el cubo de basura.

¿Y por qué termina en el contenedor? Gracias a la oportuna aparición de Puck (Mark Salling). Sabía que Puck y Quinn iban a terminar juntos en algún momento y no podría estar más contento por ellos, estaba claro desde el principio que están destinados. «Keep Holding On» es mi canción favorita y no podría estar más de acuerdo con Lea Michele cuando afirma que esta canción marca la verdadera esencia de Glee. Admito que cuando me enteré de que Puck iba a ser el encargado de volver a cantarla tenía mis dudas, pero ahora que he visto el contexto me ha parecido precioso, recordemos que cuando la cantaron por primera vez fue cuando todo el colegio se enteró de que Quinn estaba embarazada y todos se vistieron de blanco para la actuación mientras ella no paraba de llorar. Me ha gustado que hayan encajado la canción de nuevo de una forma similar porque ahora Quinn le oculta todo su pasado a Biff, pero sobre todo me ha encantado que volviesen a interpretar la coreografía aunque se echase de menos a Finn (Cory Monteith), que ha estado presente igualmente por todas las referencias que le han hecho. Te echamos de menos, Cory.

Sí, me faltó una conversación entre Quinn y Rachel (Lea Michele).

A la vuelta de Quinn le añadimos a la segunda más ausente: Brittany (Heather Morris) y ya tenemos a toda la Unholy Trinity de nuevo reunida y como no podía ser de otra manera nos regalan su mejor actuación hasta el momento, su rendición de «Toxic» fue magistral, ya no solo por los guiños a bailes que habían hecho juntas incluyendo el del piloto de la serie cuando audicionan para el Glee Club y tampoco que volviesen a vestirse de animadoras, si no la parte sexy de la canción, madre mía, madre mía.

El regreso de Brittany nos trae una nueva edición de Fondue For Two, que no sé vosotros pero yo echaba mucho de menos, esta vez las invitadas son las divas por excelencia: Rachel y Mercedes (Amber Riley) y ¡la novia de Lord Tubbington! La ex-animadora es ahora todo un genio de las matemáticas pero sigue echando de menos bailar, hecho que Santana le recuerda y es cuando las dos se vuelven íntimas de nuevo y se replantean su relación amorosa, ¡Brittana is on! ¿Creéis que Brittany se llegará a mudar con Santana en Nueva York? Aunque ahora ella esté en una relación con Dani, todos sabemos que Demi Lovato está ahora en plena gira y no ha podido grabar más capítulos desde «Trio», por lo tanto estará ausente un largo periodo de tiempo (si es que vuelve), o que le da vía libre a Brittany para volver a enamorar a Santana, lo malo es que os puedo confirmar que si Heather decide volver a la serie como regular no va a ser a corto plazo, al menos hasta el capítulo 17 (que es hasta donde hay información) no se le vio por ningún sitio… y tampoco a Naya Rivera. Son malas noticias, sin duda, pero puede que decidan vivir su amor por su cuenta en otro sitio a partir del capítulo que viene…supongo que tendremos que esperar para saber qué tienen preparado para ellas, de todas formas me encantaría ver a Heather formando parte de la trama de NY, si no es para esta, que sea para la sexta temporada, y también hablo de Quinn con esto, pero es algo que ya veo mucho más improbable.

Cambiando de tema, volver a escuchar «Defying Gravity» siempre es bien, esta vez tuvo lugar gracias al diva-off entre Berry y Jones, otro guiño a su rivalidad durante las primeras temporadas que queda aclarado con una bonita conversación entre ambas en los baños. Kurt (Chris Colfer) no pintaba mucho en la canción pero me ha gustado que volviesen a contar con él porque la primera vez que la interpretaron, allá en la primera temporada, me atrevo a decir que nos maravillaron a todos. Pero esta vez tiene otra cosa especial, la cantaron delante de Kristin Chenoweth, que fue la primera en ponerle voz por el musical Wicked, hasta Colfer confesó que se sintió intimidado por este hecho, y no es para menos.

Así pues, a la vuelta de todos los graduados (sí, Mike (Harry Shum Jr) también volvió pero como si no estuviese allí porque solo ha hablado una vez y seguimos sin saber que es de su vida) se le unen dos guests muy importantes y especiales: la estrella estrellada de Broadway April Rhodes (Chenoweth) y la grande entre las grandes: Holly Holliday (Gwyneth Paltrow). La primera intenta salvar el club con nuevos fondos pero pronto descubre que no es tan rica como pensaba pero nos regala una nueva versión de «Raise Your Glass» canción muy adecuada para su personaje. Nunca está de más volver a saber de ella después de tanto tiempo pero pudimos descubrir que todas las estrellas invitadas del Glee Club tienen un grupo en Facebook por el que mantienen el contacto (ESTO me ha encantado) lo que hace que Holly también decida pasarse por el McKinley para amenizar la situación con su carisma natural, a esta última sí que tenía muchas ganas de volver a ver, me parece un gran personaje y no la veíamos desde la segunda temporada, muuuucho, mucho tiempo. Por favor, Gwyneth, ¡no te marches nunca!

100 capítulos son muchos y me alegro de que Glee los haya alcanzado, esta serie siempre sera muy especial para mí, fue la primera que empecé a seguir día a día desde Estados Unidos, con ella entré el mundo seriéfilo y crecí con todos y cada uno de los personajes que de alguna u otra forma me representan y creo que casi todos los que veis Glee os habéis sentido identificados con alguno de ellos. Es por eso lo que hace esta serie tan especial y también los números musicales que la componen, que con tras casi 700 versiones de canciones a sus espaldas se siguen reinventando continuamente y no cae en la pesadez. Es cierto que tuvo sus altibajos y no siempre se han tomado las decisiones correctas pero yo la seguiré viendo hasta el final y sí, puede que sea de los pocos que le alegran que tenga una sexta temporada confirmada, pero sé que cuando se acabe dejará un vacío muy grande, y vosotros también lo sabéis, al menos todos aquellos que hayan llegado a leer esto. Os animo a dar vuestra opinión de qué significa Glee para vosotros en los comentarios, de verdad que me gustaría leerlo, así que ¡muchas gracias a todos los que me escribáis!